Pulsera livestrong

Reconozco que tiendo a huir de la moda (excepto que suponga un beneficio) y valorar las cosas que tienen menos reconocimiento. Reconozco que cuando vi por primera vez la pulsera pensé que era una forma de decir "mira que bueno que soy que colaboro en la lucha contra cáncer", que era una forma de ser diferente, de hacerse notar. Ahora mi pensamiento, sin embargo, ha cambiado. Pienso que, al conseguir un porcentaje importante de gente que la lleva, somos todos un poco más conscientes de que no todo el mundo tiene la suerte de estar sano. Me preocupa menos si luego el dinero recaudado con la pulsera se emplea correctamente (que estaría bien que así fuera). Para mi, colaborar con una causa se puede hacer de muchas formas: económicamente, como voluntario (si tu tiempo sirve de algo) o como divulgador, que es lo que creo que hace esta pulsera. Hablo siempre sin tener datos de cuánto dinero se ha recaudado con esta campaña. Si además de divulgar resulta que ha conseguido una cantidad considerable y se ha invertido correctamente todavía mejor.