Entrevista: Magda Gomar

Interesante entrevista a Magda Gomar en La Contra que merece mucho la pena ser compartida y más todavía, ser leída entera, pues aunque tiene frases para compartir es mucho mejor leerlo en conjunto.

  • Hay que ser humilde, hay que pedir ayuda. Yo se la pido al Padre Eterno, pero no pertenezco a ninguna religión, ni falta que hace. Pide sabiduría y te será dada. Pide tranquilidad y te será dada. Pide lo que quieras porque hay algo superior, ponle el nombre que quieras. Busca tu alma. Puedes creer en la religión que sea, pero si no miras dentro de ti, si no te escuchas, no sirve de nada.
  • La vida es un juego: si no juegas, pierdes. Déjate fluir, ten ilusión, ten esperanza, nadie te la puede quitar.
  • Yo todo lo resuelvo a base de juegos: si alguien viene a pedirme ayuda, le hago meter su problema en un cubo de agua y le damos vueltas redondas hasta que el dolor se transmuta y el mal se ahoga.
  • Aprende a jugar; si no es jugando, nunca llegaremos a resolver nada. No lo olvides: los problemas, los males, las dificultades, todo es un juego.
  • Queremos que todo fluya por la fuerza, que todo nos vaya bien. ¿Cómo puedes conseguirlo si no dedicas ni un minuto de tu tiempo a escucharte, a entenderte?
  • Desde muy pequeña aprendí que tenía que luchar. Nadie me solucionaría mis problemas. Si no cambiaba mi actitud, la batalla estaba perdida. La cambié. No podía estar apagada, cantaba y silbaba al mismo tiempo. Ponía mi gramo de alegría.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Alguien sabe cómo contactar con la Sra. Magda Gomar? ´mi e-mail es: esmola@eresmas.com
gracias
Ester

ZilC dijo...

Quizás lo más fácil sea contactar con la vanguardia.

Anónimo dijo...

Hemos de mirar hacia adentro siempre. Hemos de jugar muchas veces con las sorpresas que nos trae la vida, pero todo no es juego. Si no nos queremos no podremos querer a los demás. Yo si tengo un Dios Padre al cual llego a conocer en la religión católica. Jesús vino a enseñarnos quien era el Dios en el que debíamos creer, el Dios de Isaac i Jacob... i nos dijo que al dirigirnos a El le dijéramos: Padre nuestro que estás en el cielo...
Un petó Igone.